Responsabilidad y «poder» personal

Tengo que comenzar este post diciendo que no me simpatiza la palabra “poder” en un contexto psico-emocional, no obstante, considero importante hacer alusión a la parte del ser humano que es “exclusiva e íntegramente” responsabilidad de sí mismo, ya que todo lo demás no lo es…

Cada persona es responsable de su pensar, sentir y actuar, por acción y por omisión.  Lo único de lo que somos dueños en realidad  y  lo que podemos gestionar u optimizar, es de nuestra propia persona, en definitiva, somos dueños de lo que decimos u callamos, de lo que sentimos o dejamos de sentir y de lo que actuamos o no realizamos. Esas serían las 6 áreas donde en realidad nuestro poder puede manifestarse. Todo lo demás, no es nuestra competencia (lo cual no significa que no nos importe o no influyamos), a excepción de nuestros hijos, claro está, durante su periodo de maduración (ya que una vez hayan alcanzado la adultez, tampoco serán una responsabilidad, sino alguien a quien seguir amando).

Considero importante la aclaración de esta idea, ya que muchas de las carencias emocionales  y relacionales que se dan en las personas tiene que ver con el hecho de no saber diferenciar los límites o lindes de la propia y ajena responsabilidad, invadiendo u invalidando la de otros o dejando que otros se hagan cargo de la propia.

¿Te haces cargo de ti mism@? ¿Asumes responsabilidades de otros? ¿Cedes tu poder? ¿Para qué?