La vergüenza
La vergüenza es una emoción secundaria que surge del miedo a ser evaluado, juzgado y/o humillado en un contexto social o relacional. Es un mecanismo evolutivo de adaptación, ya que nos permite señalizar que es lo correcto y aceptable dentro del grupo de pertenencia y pasar a asumir las reglas sociales como propias, para formar parte del mismo. Por lo tanto, tiene una función adaptativa.
Sin embargo, cuando esta emoción se desborda, interfiere en la vida diaria de la persona convirtiéndose en limitante o perjudicial y provocando un gran malestar, angustia o dolor. Esto se da debido a que la persona (ya sea consciente o inconscientemente) se interpreta o percibe a sí mism@ negativamente o “peor que los demás” y se repite una serie de mensajes negativos constantes: “no valgo nada”, “voy a hacer el ridículo”, “se van a reír de mi”…
Cuando la vergüenza es patológica, se da un bucle: pensamientos negativos sobre ti mism@,descenso de la autoestima e incremento de la inseguridad, que refuerza el comienzo de un nuevo ciclo, incrementando nuevamente los pensamientos negativos.
Para superar estas situaciones, lo principal es dejar de darle tanto poder a lo que los demás piensan de ti y tratar de aceptarte a ti mismo tal y como eres sin mandarte mensajes negativos constantes sobre tu persona. Es normal sentir vergüenza en ocasiones y de forma puntual, por lo que es sano normalizar esta emoción sin patologizarla. Sé consciente de qué situaciones y/o personas disparan tu vergüenza, para poder percibir las carencias o inseguridades que se ocultan tras de ella y poder elaborarlas, únicamente te están mostrando tu autocritica y revelando la necesidad de tratarte a ti mismo con mayor flexibilidad y aceptación.
¿Sientes vergüenza?¿En qué situaciones?¿Con quién?¿Te aceptas?




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