La sorpresa

La sorpresa es una emoción que aparece ante un evento imprevisto. Es de corta duración y como las demás emociones básicas, cumple una función adaptativa (supervivencial); nos permite afrontar situaciones inesperadas activando la atención y conectándonos con el instante, para reaccionar lo más rápido posible.

Múltiples pueden ser los desencadenantes de la sorpresa; estímulos novedosos, inesperados, abruptos, extraños, cambios bruscos, interrupciones…De alguna forma y por ser tan breve, la sorpresa es una emoción que está relacionada con las demás (tristeza, alegría, miedo…) y que adquiere el mismo tono de la situación emocional que la ha generado. Es una reacción emocional ambigua, ya que hay personas a las que les agradan las sorpresas y otras a las que les desagradan. La expresión facial común a la reacción de sorpresa es elevar las cejas y abrir bien los ojos, en ocasiones también la boca.

Sinónimos de sorpresa serían: asombro, perplejidad, desconcierto, extrañeza, pasmo…